Ser testigo del martilleo ensordecedor de las máquinas que fabrican municiones para fusiles y conectar esa experiencia con el trabajo de oficina para mejorar los procesos de abastecimiento a los soldados de las Unidades en todo el país, es el propósito de las visitas profesionales que realizaron funcionarios del Comando de Apoyo a la Fuerza (CAF) del Ejército de Chile, encabezados por su Comandante, General de División Carlos Castillo V., a las instalaciones de Fábricas y Maestranzas del Ejército (FAMAE), en la comuna de Talagante.
Las delegaciones del CAF, integradas por personal militar y civil, pudieron conocer de primera mano la fabricación de productos de defensa que FAMAE provee al Ejército y, también, las labores de mantenimiento de carros de combate Mowag y de electrónica de los tanques Leopard.
Entre los materiales que más llamaron la atención a los visitantes estuvieron la nueva pistola Volcano F, de tecnología original italiana, en cuyo diseño participaron profesionales de FAMAE, y el ruidoso proceso de fabricación de vainillas para municiones, conociendo su materia prima, que es latón dorado (70% cobre y 30% zinc).
El Coronel Luis Espinoza V., Jefe del Estado Mayor del CAF, explicó el propósito de estas visitas: “Conocer las plantas productivas de la empresa que están orientadas fundamentalmente para satisfacer las necesidades de bienes y servicios para la institución, referido a la producción de productos bélicos y el servicio de mantenimiento, lo que permite visualizar cómo son los procesos productivos en la fabricación de distintos tipos de material, apreciando la transformación de la materia prima a productos de línea como munición, armamento, granadas, cohetes, etc., observando la preocupación por la prevención de riesgos y sistemas de control de calidad y la aplicación de tecnología orientada a la defensa, lo que acrecienta el acervo cultural militar y contribuye al mejor desempeño a las tareas propias del CAF”.
Asimismo, la Sargento 1° Elizabeth Puga, del Departamento de Personal del CAF, destacó que este conocimiento “nos permite empatizar con las unidades que, por ejemplo, necesitan municiones, porque con las visitas sabemos cómo se producen y el tiempo de fabricación, de manera que, al tramitar administrativamente los requerimientos, podamos reducir el periodo de falta del material”.
Antes de abandonar las instalaciones de Talagante, los funcionarios del CAF fueron informados de la próxima incorporación del sistema de pruebas de motores en FAMAE -hasta ahora externalizada a otras empresas-, que permitirá optimizar el uso de los recursos fiscales y modernizar las actividades de mantenimiento de los carros de combate y de los enormes motores de los tanques del Ejército.
Por Víctor Carvajal, periodista de la Dirección de Comunicaciones Estratégicas del Ejército