El ventilador mecánico Neyün comenzó su implementación en la red de salud nacional, siendo el Hospital Militar de Santiago el primer recinto que opera con este equipo. El implemento, que fue presentado en el Ministerio de Defensa después de obtener su certificación, es el resultado del esfuerzo mancomunado de las empresas de la defensa con el sector privado.

Este es el momento culmine de meses de trabajo por parte de la empresa DTS, junto a la Fábrica y Maestranzas del Ejército (FAMAE) y la Empresa de Aeronáutica Nacional (ENAER), el que dio como resultado este equipo que pasó por las pruebas y certificaciones de las Universidades de Chile, Católica y de Valparaíso, además de la Sociedad Chilena de Medicina Intensiva.

El equipo es de fabricación 100% chilena, sin la necesidad de importación de elementos para su desarrollo. El ventilador Neyün (“respirar” en mapudungún) se convierte en un alivio para la red de salud nacional, permitiendo tener dependencia en la creación de estos equipos.

“El ventilador mecánico construido 100% en Chile es una realidad, gracias al esfuerzo mancomunado de la empresa privada liderado por DTS, junto al Ejército de Chile a través de FAMAE y de ENAER. Hemos podido generar las instancias de construcción de un ventilador mecánico invasivo, el que cuenta con todas las capacidades necesarias para el tratamiento y manejo de un paciente crítico”, explica el Coronel Francisco Silva, director médico del Hospital Militar de Santiago, recordando que su uso no está limitado solo a pacientes con COVID-19.

A su vez, el Dr. Antonio Hernández, medico jefe unidad de pacientes críticos del Hospital Militar, destacó que Neyün “no tiene ninguna diferencia significativa con ventiladores tradicionales que ya existen en el mercado. El trabajo que ha hecho DTS, junto a FAMAE y ENAER ha sido óptimo en este sentido. Es un ventilador que entrega en entera satisfacción todos los requerimientos que necesita un paciente para su recuperación”.

El proyecto Neyün fue desarrollado en solo tres meses por la empresa DTS, junto a FAMAE y ENAER, instituciones de la defensa que cuentan con la capacidad de construir los implementos necesarios para ensamblar este equipo, es decir, no se requiere la importación de elementos desde el extranjero para producir el ventilador.

“Las Fuerzas Armadas son desarrolladas, creadas y pensadas para enfrentar crisis, ese es el objetivo y son entrenados, por tanto, las industrias que están relacionadas con ello, están orientadas a ello. Nosotros nunca habíamos estado en una crisis como esta, pero nos dimos cuenta que los protocolos y entrenamiento son absolutamente válidos para enfrentar esta pandemia”, consideró Eduardo Aedo, gerente general de la empresa DTS.

Tecnología que puede cambiar vidas

El marido de la señora María Eugenia Zamudio lleva cuatro semanas internado por complicaciones relacionadas al coronavirus en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Militar. Siendo civil y suscrito a una Isapre, se convirtió en el primer paciente en ser conectado a Neyün.

“Él estuvo resfriado una semana y a la semana siguiente empezó con fiebre, su médico particular le dijo que era algo viral y lo mandó a la casa. Al día siguiente empezó con fiebre de 40°C.”, recuerda Zamudio, agregando que en solo dos días su esposo quedó hospitalizado y con conexión a un ventilador mecánico.

Hoy el marido de la señora Zamudio va en mejoría y reconoce que hubo un momento de mucha gravedad, “pero gracias a Dios ha salido adelante, ha sido un gran manejo del equipo médico. Estoy muy contenta porque sé que está evolucionando muy bien”.

Sobre la participación de su marido en el proyecto Neyün, Zamudio dijo que “acá existen siempre las mejores tecnologías. Estoy muy agradecida que él tenga la oportunidad de participar de esto (…) Para este equipo médico solo tengo palabras de agradecimiento y admiración. Tengo una fe muy grande para ellos mis felicitaciones y admiración”, finalizó.