De familia de mecánicos, desde pequeño ha tenido interés en la mecánica y encontrando soluciones. Acostumbrado a resolver problemas, no fue difícil para él dar con una salida práctica y realista a una dificultad detectada en el terreno. Se trata del Cabo 1° Cristian Noriega R., quien ideó y concretó la modificación de vehículos M-548 para el transporte de combustible y de agua potable, a partir de material en desuso, hasta lugares de difícil acceso.
La necesidad surgió durante el Ejercicio Jaukén (2022), en la Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, cuando el personal tuvo que transportar suministros hasta las zonas de empleo. “Los camiones aljibe o de combustible tienen dificultades para llegar hasta donde sí llegan los vehículos a oruga, debido al terreno, entonces había que encontrar una forma más eficiente para abastecerlos”, relata el Cabo 1° Noriega, actual Jefe del Taller Eléctrico en la Compañía de Mantenimiento del Regimiento Logístico N° 5 “Magallanes”.
Oriundo de Concepción, inició su carrera militar como Soldado Conscripto en 2007. “Busqué en qué podía aportar a mi país e ingresé al Servicio Militar, ahí conocí al Ejército. Vengo de una familia de mecánicos, acá me enteré del Servicio de Material de Guerra y logré quedar como mecánico”, recuerda el Cabo 1° Noriega, quien, hoy, casado y con dos hijos, ya cumple 16 años de servicio, 14 de ellos en Punta Arenas.
Con la detección de la dificultad durante Jaukén, su mente innovadora comenzó a trabajar. Su propuesta: la reutilización de vehículos y elementos dados de baja, en este caso, de dos carros M-548, el primero equipado con seis estanques de combustible de tanques Leopard en desuso y el segundo con una cisterna de agua de fibra de vidrio.
La prueba de fuego de estos nuevos sistemas, se vivió durante el Ejercicio Multiescalón 2024, de la V División de Ejército. El resultado fue exitoso. Ahora las unidades podían ser abastecidas sin importar la dificultad del terreno.
“Es un orgullo grande para mí poder retribuir al Ejército y al país con un granito de arena. Esto no es para mí, ni tampoco para el pelotón de tanques al que apoya con combustible o con agua, es para todos los chilenos, es para el país, para el que se está trabajando. La idea de uno al ingresar a la Institución y hacer el Servicio Militar es retribuir lo que es ser chileno: este es mi aporte”.
De esta manera, los dos vehículos recuperados pueden transportar 2.700 litros de combustible y 2.600 litros de agua, respectivamente.
Con la aprobación del sistema, el Cabo 1° Noriega ya trabaja con su equipo en la elaboración de más vehículos de este tipo. Sus proyecciones también apuntan a seguir aportando sus conocimientos al Ejército mediante el Cuerpo Militar del Trabajo, beneficiando directamente a la comunidad.
Finalmente, reflexionando sobre su propia vida en la Institución y sus logros, el Cabo 1° Noriega se dirige a las futuras generaciones de militares del Ejército, diciéndoles que “Con vocación y voluntad se pueden lograr grandes cosas y todo lo que uno quiera. Si quieren ingresar al Ejército, desde conductor de tanque o mecánico, lo pueden hacer”.