La emergencia está declarada en la comuna de Licantén, en la Región del Maule. Producto de las lluvias y el desborde del río Mataquito, sus habitantes perdieron sus casas, campos de cultivo o animales. Es en medio de esta grave situación que efectivos del Ejército se han desplegado hasta la zona afectada, entregando un alivio a sus vecinos.

Remoción de barro desde viviendas, calles y acequias, apoyo en mover mobiliario y la instalación de un Puesto de Atención Médica Especializada (PAME) para apoyar el hospital de Licantén, son algunas de las actividades que están realizando militares del Ejército que integra la Jefatura de la Defensa Nacional para la Región.

“Nos avisaron y vinimos de inmediato”, recuerda el Sargento 2º Álvaro Ferrada P., operador de maquinaria del Destacamento de Montaña Nº 17 “Los Ángeles”, agregando que “trabajamos para apoyar a las personas, con el alma y el corazón”.

Desde temprano, comienzan sus jornadas los más de 100 integrantes del Ejército, que han apoyado a los habitantes de Licantén y el agradecimiento de la población no se hace esperar. Doña Ana González reside hace más de 80 años en la localidad de Placilla, no es la primera vez que sobrevive una emergencia, pero reconoce que esta es la primera de esta magnitud. “Quedó solo aquí todo, lleno de agua y con barro, todo resbaloso”, recuerda, mientras mira lo que queda de su casa.

Observando a los soldados que remueven los escombros, les dice “quiero agradecerles mucho a ellos que me vinieron a ayudar”. “Para eso nos metimos como voluntarios al servicio”, responde el Soldado Conscripto José Mancilla. “Nos sentimos bien y alegres porque es una ayuda, que se sientan tranquilos y felices que estamos ayudando”, agrega el Soldado Conscripto Felipe Guajardo.

Evolución de la emergencia

La emergencia aún no termina y las lluvias podrían volver. “Siempre estamos preparados para enfrentar más lluvias, hay buen elemento para poder trabajar de buena forma, hay maquinaria que se ha facilitado al Ejército, así que sí se puede realizar un buen trabajo en estos momentos”, destaca el Teniente Guillermo Araya, comandante de la Unidad Fundamental de Apoyo a la Ciudadanía (UFAC).

Efectivamente, la maquinaria sigue llegando a Licantén. Desde el Regimiento Nº 16 “Talca” se trasladó una retroexcavadora, la que será empleada en la ribera del río Mataquito, para abrir un brazo y permitir el avance de su caudal.

“Eternamente agradecido por los muchachos y el Ejército de Chile, que en esta oportunidad nos ha ayudado una enormidad”, comenta Alex, vecino de la zona que ya advierte la pérdida total de su casa. Lleva dos días sacando el barro de su propiedad junto a los soldados del Regimiento “Maipo” y dice que “al ver la presencia de militares uno se siente seguro, está tranquilo, le da ánimo. A mí me dio ánimo de trabajar (...) este es el impulso que me da hoy día para estar con ellos, con la carretilla”.

Al inicio de la emergencia, la Región del Maule registró más de 32 mil damnificados, de ellos más de 2.000 están en la comuna de Licantén, más de un tercio de su población. La comuna de solo 273 m2 de superficie sufrió, en un inicio el corte de caminos y la suspensión de suministros básicos.