Cumpliendo más de 30 años de servicio al país, el Ejército de Chile ascendió a 60 nuevos suboficiales mayores, quienes, con su experiencia, serán los asesores de las tropas y comandantes en sus respectivas unidades militares, en todo el territorio nacional.

Los suboficiales, quienes alcanzan la más alta investidura jerárquica de su carrera, recibieron sus nuevos grados con una ceremonia interna realizada en el Edificio Ejército Bicentenario, cuartel general de la Institución, luego de ser seleccionados tras un riguroso proceso que contempló, competencias profesionales, cualidades personales, virtudes militares y su proyección hacia el personal subalterno.

En este acto tradicional, el Comandante en Jefe del Ejército, General de Ejército Javier Iturriaga D., hizo la entrega de la réplica de la espada del General Bernardo O’Higgins Riquelme a los nuevos suboficiales mayores, quienes asumen una importante labor al asesorar al comandante en el desarrollo profesional de los suboficiales y soldados de tropa profesional, siempre orientados en el fortalecimiento del componente moral, intelectual y físico.

En la oportunidad, hizo uso de la palabra el General de División José Marzal S., Comandante General de Personal, quien junto con reconocer la importancia y valor del apoyo familiar en alcanzar la cúspide de la carrera de un suboficial, también los invitó a que “este sea un momento de especial y profunda reflexión, con absoluta conciencia en los nuevos desafíos que el Ejército les confiará y en los destinos que para cada uno de ustedes designó, debiendo constituirse a partir de hoy en un capital humano referente de las generaciones de jóvenes suboficiales, con efecto multiplicador de las características personales y profesionales que les adornan y de ejemplo den el ejercicio de la disciplina, experiencias, vocación y liderazgo”.

“Quiero destacar que tengo el honor de interpretar el sentir de todos los que hemos ascendido, pues en estos momentos, los recuerdos, la nostalgia y la satisfacción del deber cumplido, invaden nuestros corazones al evocar las experiencias vividas en estos más de 30 años de servicio al Ejército, Institución donde hemos encontrado nuestra forma de realización más integra y plena. Esta investidura es la consecuencia de nuestra entrega irrestricta y arduo trabajo durante toda la carrera militar”, dijo a su vez el Suboficial Mayor Juan Carlos Treuquil L.

La ceremonia cerró con la entonación del himno del Ejército de Chile, marcando de esta manera, el inicio de una nueva etapa en la carrera de los Suboficiales Mayores, quienes un rol preponderante en sus respectivas unidades, desde Putre hasta Tierra del Fuego.

Por Nicolás Borcoski, periodista de la DIRECOME