En el Campo de Instrucción y Entrenamiento “Barrancoso” en la Comuna de Cochrane, Región de Aysén, y con temperaturas de -15 C° y fuertes nevadas, efectivos de la Compañía Andina Divisionaria (CAD) N° 20 “Cochrane”, ejecutaron durante tres semanas la Fase de Instrucción de pequeña unidad, tanto de secciones andinas como también a nivel de Plana Mayor en el puesto de mando. 

“Esta fase fue de gran importancia, ya que después de dos años de pandemia la unidad pudo reforzar las capacidades tácticas en un escenario muy cercano a un contexto real, donde los integrantes de la Compañía deberían emplearse”. Así es como el Capitán Carlos Iturriaga da a conocer las características donde la unidad debe estar apta para poder actuar, como lo son los terrenos nevados, fuertes vientos y saber cómo sobrellevar y desarrollar sus capacidades a temperaturas bajo cero. 

En un terreno completamente hostil, los oficiales, suboficiales y soldados de tropa profesional, debieron cursar una semana teórica, para luego poner en práctica en terreno todo lo aprendido. "Previamente, me preparé mental y físicamente para poder realizar esta instrucción. Como militar uno siempre se siente capacitado, pero es normal sentir nerviosismo al enfrentarse a condiciones climáticas extremas, ya que siempre puede existir un percance”, explicó el Soldado de Tropa Profesional Camilo Brevis al llegar al Campo de Instrucción.  

“Esta actividad tenía como finalidad reforzar las capacidades técnicas y tácticas de la pequeña unidad, donde el trabajo individual como grupal fueron evaluados, pero también se pretendía afiatar al equipo y conocer cómo se desenvuelven en este tipo de condiciones”, detalló el Capitán Iturriaga. El oficial también explica que en esta instrucción participaron 18 integrantes de la Institución, quienes con abnegación y fortaleza supieron sobrellevar instrucciones como paso de zonas de peligro, técnicas avanzadas de tiro, técnica de asalto a la posición, entre otras. 

De la misma manera, y formando parte del área evaluadora de esta instrucción, el Teniente Cristian Fuentes, destacó el espíritu de cuerpo de cada soldado, que con un desempeño profesional y las ganas de hacer bien las cosas, lograron nivelar sus conocimientos, previo a Juramento de la Bandera 2022. “Ha sido una experiencia muy enriquecedora, ya que ser parte de la formación de la tropa en el ambiente de combate y posteriormente evaluarlo, genera un aprendizaje de ambas partes pudiendo corregir y mejorar aspectos de detalle”, expresó. 

Por Andrés Armijo, periodista de la Dirección de Comunicaciones Estratégicas