En compañía de las autoridades de la Institución, sus profesores y familiares, los cadetes de primer año, de la promoción 2025-2028, recibieron los espadines que los identifican como alumnos de la Escuela Militar.
Esta ceremonia representa el momento en que el cadete asume con plena responsabilidad, su destino como futuro oficial del Ejército de Chile, donde se convierten en soldados para servir a la patria abrazando la profesión militar, reflejando su compromiso con los valores que sustentan la Institución: lealtad, honor y dedicación a la defensa de la patria.
En su discurso, el Director de la Escuela Militar, Coronel Guillermo Castro B., dijo a sus alumnos: “Los insto a reflexionar sobre la vocación militar, continúen abrazando las tradiciones de nuestro invicto Ejército, proyecten cada uno de sus actos, como los comandantes que ejercerán el mando de nuestra institución por los próximos cuarenta años, busquen la excelencia en su cometido, actúen con decisión, firmeza y sentido humano en el ejercicio del mando, sean ejemplo de austeridad y rectitud, en el hermoso camino que han voluntaria y conscientemente elegido para desarrollarse como oficiales de Ejército”.
Tras la alocución, a los cadetes se les tomó la promesa de rigor, en que se comprometen a servir al país, cumpliendo con los valores que se imparten en el plantel. Posteriormente, llegó el momento más emotivo de la ceremonia, en el cual recibieron los espadines de mano de sus padres, símbolo tácito de su compromiso con Chile que ratificarán ante Dios en su Juramento a la Bandera.
Respecto a esta ceremonia, la Cadete Romina Muñoz P. mencionó que “recibir el espadín significa esfuerzo, trabajo y orgullo, tanto de mi parte como de mi familia. Es cerrar con éxito mi primera etapa en la formación como futura Oficial de Ejército”.
Por su parte, el Cadete Maximiliano Ross Z. sostuvo que “la entrega de espadines en un tremendo sentimiento de orgullo, valor y gratitud. Es la primera gran meta que logramos, pero es solo la primera de muchas en nuestra carrera militar”.
La compañía de la familia es primordial en esta ceremonia, un ejemplo de ello es el caso de Guido Morandi L., papá del Cadete Piero Morandi A., quien expresó que “para mí tiene mucha importancia entregarle el espadín, es acompañarlo y verlo crecer, y de estar presente en esta primera etapa de su carrera militar”.
Como también, Paola González D., mamá del Cadete Franco Espinoza G., manifestó que la entrega de espadín “es importante porque es un hito de un proceso que han vivido. En esta etapa han estado esforzándose, con harto sacrificio. Nos hemos visto poco, pero va a valer el esfuerzo. Esto simboliza mucho, porque va a servir a la patria y a él le gusta”.
El Espadín
El espadín es un arma blanca tipo bayoneta, que es parte de la tenida de salida de los cadetes, que se basa en el modelo de la bayoneta de infantería alemana del año 1871 y fue adoptado como parte del uniforme mediante el Decreto del Ejército N° 16 del año 1890, en contexto de la prusianización de la Institución.
Su empuñadura tiene 16 rayas, número que coincide con la fecha de fundación de la Escuela Militar.