Con una mini parada y la oportunidad de ser "militares por un día", el Regimiento de Artillería N⁰ 1 "Tacna" realizó la actividad "Sonrisa de Héroe”, en dependencias de la unidad, y en coordinación con la Fundación Deportistas por Un Sueño, congregando a más de 70 niños que presentan enfermedades complejas o terminales.

En la ocasión, los hombres y mujeres del Ejército realizaron un alto en sus actividades para entregar a cada menor un momento de distensión y alegría.

“Es bonito, porque uno los ve rudos, uniformados y fuertes, pero en su interior son papás protectores que se reflejan en los niños y me doy cuenta en las caritas de los militares que están con los niños disfrutando, se enternecen y les entregan ese cariño”, relata la presidenta de la Fundación, Sandra Corrales, quien agrega que la sonrisa entregada por cada niño demuestra que “te quiere y que agradece que le des un espacio”.

Para Alison Crespo, mamá del pequeño Manuel, es la primera vez que participa de esta iniciativa, y reconoce que “es muy hermoso: estamos felices y agradecidos con la fundación y con el Ejército”.

Un día distinto

Los niños pudieron conocer a los ejemplares caninos entrenados por el Ejército, conocer el equipamiento y vestuario militar y conocer la Banda Instrumental del Regimiento, entre otras actividades. Además, cada niño tuvo la oportunidad de participar de un desfile militar, siendo acompañados por un integrante de la unidad. “Fue una gran sorpresa la verdad y muy agradecido con la fundación por traerme aquí a ver la parada militar”, dijo Fernando, niño que participó de la jornada.

Por su parte, el Coronel Mauricio Vargas S., Comandante del Regimiento de Artillería N° 1 “Tacna”, explicó que participar de estas instancias “es importante, porque no estamos ajenos a la sociedad. También somos papás y nos llega de cerca que algunos niños puedan tener tratamientos difíciles y queremos aportar con nuestro granito de arena en estos momentos, de poder ayudarlos a tener una sonrisa, jugar y nada más que hacerlos pasar un momento agradable”.

Cabe recordar que la relación entre la Fundación y la unidad militar comenzó en 2012, lazo que solo se vio interrumpido durante la pandemia, siendo está una jornada que acompañará a cada niño como un grato recuerdo junto a su Ejército.

“Estas actividades son bonitas, por el hecho que se acerca a la comunidad y muestra el trabajo que hacemos, que los niños la pasen bien, tengan una sonrisa y feliz por este momento y por la oportunidad que me dieron al venir”, expresó por su parte el Cabo 1° Esteban Caimilla B., encuadrado en el Centro de Entrenamiento Canino del Ejército.

La jornada finalizó con distintas presentaciones artísticas y de la small band de Carabineros.