Se promulga la ley sobre abolición de la esclavitud en Chile. Se decreta lo siguiente: “1° Son libres cuantos han nacido desde 1811 y cuantos nazcan en los territorios de la República; 2° Son libres cuantos pisen el suelo de la República y quienes hayan sido conducidos fuera de ella; 3° Cuantos hasta hoy han sido esclavos, son absolutamente libres desde la publicación de este acuerdo”.